La Futura Reforma Fiscal

La Futura Reforma Fiscal

Nuevos pasos hacia la futura Reforma Fiscal

En un artículo anterior del pasado Septiembre, desde Asesoría Online Roldán & Asociados ya hacíamos eco del titular de este artículo: la reforma fiscal que está por venir. Como asesoría fiscal online, cada vez más presente en núcleos de negocio como Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Málaga, La Coruña, Zaragoza y cobertura en toda España, no podemos dejar pasar por alto nuestras impresiones respecto a una reforma fiscal que se empieza a hacer oír por todas partes, y que sin duda está tocando a las puertas del sistema tributario español.

En el IRPF se persigue reducir la fiscalidad de los asalariados y autónomos, tan castigados en los últimos tiempos, con una escala de gravamen de siete tramos y un tipo máximo del 52%. Desde Bruselas se hace cada vez más énfasis en la necesidad de reducir tipos y tramos. Hay expertos que apuntan a la necesidad de crear un tipo único de IRPF, y que sean los mínimos exentos (personal y familiar) los que estén sujetos a escala de progresividad, es decir, que sea la situación personal y/o familiar la que determine que un contribuyente tribute muy, poco o nada por debajo de ese tipo único común para todos. Por otra parte, se fomenta el alquiler de vivienda que permite desgravar tanto al arrendatario como al arrendador, a diferencia de la adquisición de vivienda que deja de tener deducción desde este año 2013 (las nuevas adquisiciones).

En cuanto al IVA, no cesan las presiones de Bruselas instando a España a aumentar su recaudación. Todo parte de que en nuestro país contamos con un tipo general del 21%, otro reducido del 10% y un superreducido del 4%. Aumentar la recaudación del impuesto pasa por equiparar al tipo general los llamados tipos reducido y superreducido, lo que sería una medida impopular para la ciudadanía si fuera aprobada desde MADRID, al ser el tipo que grava los alimentos, medicamentos, entre otros de extrema necesidad.

asesoria-online-roldan-y-asociados-impuestosEn lo que respecta a las empresas, el Impuesto sobre Sociedades es la figura impositiva que más ha visto caer su recaudación. El elevado número de deducciones que aún están sobre la mesa, provocan que el tipo nominal del 30% quede en un 5% de tributación efectiva para las grandes empresas. Se trata de una figura impositiva que exige una reforma de calado en esa dirección, eliminar la mayor parte de las deducciones a las que prácticamente ninguna Pyme tiene acceso y de la que sin embargo se benefician las grandes compañías. Este camino tiene su riesgo, para los inversores extranjeros que apuestan por situar sus empresas en nuestro país.

Por último, para cerrar las principales figuras impositivas que entran en juego en la reforma del sistema tributario, nos queda mencionar al Impuesto sobre el Patrimonio, recuperado en medio de la vorágine de la crisis económica, para dar respiro a las arcas públicas y contrarrestar los efectos del elevado déficit público. Las previsiones que se manejan van encaminadas a crear un impuesto para los “ricos” ligado al IRPF, que salve los inconvenientes del Impuesto sobre el Patrimonio, puesto que muchas propiedades se tapaban bajo la figura de cualquier entramado empresarial. Se trata de un impuesto cuestionable, puesto que los bienes a declarar en el mismo ya han liquidado sus compromisos con el Fisco, al proceder de fuentes monetarias netas de impuestos, o bien de transmisiones mediante sucesión o donación que ya han liquidado sus derechos. La cuestión es buscar el modo de gravar a los “ricos”, creando una figura impositiva tal como el “Impuesto sobre la Riqueza”.